Mbappé sufre penalti ante el Atlético de Madrid en la segunda parte

El enfrentamiento entre Atlético de Madrid y Real Madrid en el partido de vuelta de los octavos de final de la UEFA Champions League, disputado el 12 de marzo de 2025 en el Estadio Metropolitano, está escribiendo otro capítulo inolvidable en la historia del clásico madrileño. Con el marcador de 1-0 a favor de los colchoneros al descanso del primer tiempo, gracias a un gol de Conor Gallagher en el primer minuto, el equipo de Diego Simeone impuso una presión abrumadora sobre los actuales campeones europeos. La ventaja del Real, lograda en el partido de ida con una victoria por 2-1 en el Santiago Bernabéu, quedó neutralizada, dejando el global en 2-2 y la eliminatoria completamente abierta para la segunda mitad. La intensidad del choque refleja la histórica rivalidad entre ambos equipos, que ya se han enfrentado en finales de la competición y acumulan duelos electrizantes.

La afición presente en el Metropolitano presenció un Atlético dominante en los primeros 45 minutos, controlando el ritmo y explotando los errores de la defensa merengue. Julián Álvarez, en gran momento con 10 goles en 14 partidos recientes, estuvo cerca de ampliar el marcador con un potente disparo que obligó a Thibaut Courtois a realizar una parada crucial. Mientras tanto, el Real Madrid, incluso con figuras como Vinícius Júnior, Kylian Mbappé y Rodrygo, tuvo dificultades para generar oportunidades claras, asfixiado por el marcaje implacable de los locales.

En el segundo tiempo, el panorama cambió con los ajustes tácticos de Carlo Ancelotti, quien dio entrada a Luka Modrić y Eduardo Camavinga, aportando mayor dinamismo al mediocampo. Un penalti señalado a los 22 minutos, tras una falta sobre Mbappé en el área, reavivó las esperanzas del Real, pero Vinícius Júnior falló el lanzamiento, enviando el balón por encima del larguero y manteniendo la tensión en el ambiente. El partido sigue siendo una auténtica batalla táctica y física, con el Atlético tratando de conservar su ventaja y el Real buscando evitar una eliminación inédita ante su eterno rival en esta fase de la Champions.

Dominio colchonero en el primer tiempo

El Atlético de Madrid arrancó el encuentro con una actitud agresiva que sorprendió al Real Madrid desde el pitido inicial. Con apenas un minuto de juego, Conor Gallagher aprovechó un fallo en la salida de balón rival y abrió el marcador, encendiendo el Metropolitano. El equipo de Simeone, conocido por su solidez defensiva, también mostró eficacia en ataque, creando varias ocasiones y manteniendo la posesión en momentos clave. La presión alta funcionó como un arma letal, dificultando la construcción de jugadas por parte de los visitantes.

Julián Álvarez fue la gran estrella ofensiva del Atlético en la primera mitad. El argentino, que llegó al club como uno de los fichajes más caros de su historia, demostró estar en sintonía con el esquema táctico de Simeone. Además del disparo detenido por Courtois, participó activamente en el intercambio de pases que desestabilizó a la defensa merengue, formada por jugadores como Asencio y Lucas Vázquez. El Real, por su parte, vio cómo sus estrellas eran neutralizadas, con Vinícius Júnior y Mbappé apenas entrando en juego.

Las estadísticas del partido reflejan el dominio colchonero: el Atlético remató siete veces frente a solo dos intentos del Real hasta el descanso. La hinchada, empujando al equipo en cada jugada, convirtió el estadio en un hervidero, mientras los jugadores de Simeone mantenían la disciplina táctica que ya les ha permitido dar la vuelta a tres eliminatorias de Champions tras perder el partido de ida.

Reacción del Real en el segundo tiempo

Con el marcador en contra, Carlo Ancelotti movió el banquillo al inicio del segundo tiempo, dando entrada a Luka Modrić y Eduardo Camavinga. Estos cambios aportaron mayor control al mediocampo del Real Madrid, que comenzó a explotar mejor las bandas con Rodrygo y Vinícius Júnior. A los 10 minutos, Rodrygo estuvo cerca de empatar en una jugada por la derecha, pero la defensa del Atlético, liderada por Clément Lenglet, logró despejar en el último instante, evitando el gol de Jude Bellingham.

El momento más dramático llegó a los 22 minutos del segundo tiempo, cuando Mbappé, en un contraataque letal, dribló a José María Giménez y fue derribado por Lenglet dentro del área. El árbitro Szymon Marciniak, experimentado en decisiones polémicas, señaló el penalti sin dudar. Vinícius Júnior, encargado de ejecutarlo, tenía la oportunidad de igualar el marcador, pero envió el balón por encima del travesaño, desperdiciando una chance de oro y aumentando la presión sobre el equipo visitante.

Histórico de enfrentamientos en la Champions League

El clásico entre Atlético de Madrid y Real Madrid en la Champions League tiene un peso histórico significativo. En 10 enfrentamientos en la competición, el Real se impuso en seis ocasiones, mientras que el Atlético solo venció en dos, ambas insuficientes para avanzar en el global. El equipo merengue eliminó a los colchoneros en las cinco eliminatorias previas de mata-mata, incluidas las finales de 2014 y 2016, lo que hace que este desafío sea aún más emblemático para el conjunto de Simeone.

En los últimos años, el Atlético ha mostrado una evolución en casa en la competición. Desde la derrota ante el Ajax en 1997, el club lleva 18 partidos invicto en eliminatorias en los estadios Vicente Calderón y Metropolitano, con 11 victorias y siete empates. Por su parte, el Real, bajo el mando de Ancelotti, avanzó en nueve de las diez eliminatorias en las que ganó el partido de ida, con la excepción del Ajax en 2019, lo que refuerza su condición de favorito a pesar de la presión en el Metropolitano.

El partido de ida de esta eliminatoria, jugado en el Bernabéu, terminó con victoria del Real por 2-1, con goles de Rodrygo y Brahim Díaz, mientras que Álvarez marcó para el Atlético. Ahora, con el global empatado, el duelo en el Metropolitano adquiere tintes de final, con el ganador enfrentándose, muy probablemente, al Arsenal en los cuartos de final, tras la goleada de los Gunners al PSV Eindhoven por 7-1 en la ida.

Momentos decisivos del partido

La intensidad del juego en el segundo tiempo trajo una sucesión de jugadas que mantuvieron a los aficionados en vilo. A los 13 minutos, el zaguero Asencio salvó al Real al cortar un avance peligroso de Rodrigo De Paul, que habría quedado mano a mano con Courtois. Por el lado contrario, Rodrygo siguió siendo el principal arma ofensiva de los visitantes, creando peligro por la derecha y exigiendo intervenciones precisas de la defensa colchonera.

Otro punto destacado fue la actuación disciplinaria del árbitro polaco Szymon Marciniak, quien mostró tarjetas amarillas a Giuliano Simeone y Vinícius Júnior por faltas duras, manteniendo el control de un duelo naturalmente tenso. La entrada de Modrić también dio al Real mayor posesión, pero el Atlético continuó siendo peligroso en los contragolpes, con Reinildo cerca de ampliar el marcador en una carrera que atravesó el campo.

Números y curiosidades del clásico

Los números ayudan a entender la magnitud de este enfrentamiento en la Champions League. Aquí algunos datos relevantes:

• El Real Madrid ganó los últimos tres partidos contra el Atlético en casa en la competición, con un total de siete goles anotados.
• El Atlético no pierde un partido de eliminatoria en casa en la Champions desde hace 28 años, una racha impresionante de invencibilidad.
• Julián Álvarez suma 10 goles en 14 partidos recientes, siendo el segundo fichaje más caro en la historia del Atlético.
• Vinícius Júnior, pese al penalti fallado, ya aportó cuatro goles y cinco asistencias en la temporada europea.

Estos datos reflejan el equilibrio y la rivalidad que hacen de este duelo algo impredecible, especialmente en un escenario como el Metropolitano, donde el apoyo de la afición marca la diferencia.

Agenda de los próximos desafíos

El calendario de ambos equipos refleja la importancia de este choque en la temporada. Estos son los próximos compromisos tras el partido del 12 de marzo:

• Atlético de Madrid: visita al Getafe el 15 de marzo por LaLiga, buscando mantener el ritmo en la competición doméstica.
• Real Madrid: recibe al Rayo Vallecano en el Bernabéu el 16 de marzo, también por LaLiga, tras una victoria ajustada por 2-1 ante el mismo rival el pasado domingo.
• Cuartos de final: el ganador de este duelo se medirá al Arsenal o PSV Eindhoven, con el primer partido previsto para abril.

Ambos equipos están en la pelea por el título de LaLiga, donde el Barcelona lidera, y la Champions representa una oportunidad de gloria continental, especialmente para el Atlético, que nunca eliminó al Real en la competición.

Presión sobre las estrellas

Kylian Mbappé, pese a haber provocado el penalti, atraviesa un momento de irregularidad, con solo un gol en los últimos cuatro partidos. La afición merengue espera que el francés, autor de 29 tantos en la temporada, recupere su mejor versión en este choque decisivo. En el Atlético, Antoine Griezmann y Rodrigo De Paul han sido clave en la creación de jugadas, complementando la racha goleadora de Álvarez.

Vinícius Júnior, por su parte, sintió el peso del penalti fallado, pero sigue siendo una pieza fundamental en el ataque del Real. Su velocidad y regates continúan desafiando a la defensa rival, incluso con el marcaje cerrado impuesto por Simeone. El partido pone a prueba no solo las estrategias de los técnicos, sino también la capacidad de las estrellas para brillar en momentos cruciales.

Equilibrio táctico en juego

Diego Simeone apostó por su clásico 4-4-2, priorizando la compactación y los contragolpes, mientras que Ancelotti ajustó al Real a un estilo más vertical con las entradas de Modrić y Camavinga. La batalla táctica entre ambos entrenadores, que ya se han enfrentado en múltiples ocasiones, es uno de los ingredientes que elevan la calidad de este clásico. El Atlético busca explotar los espacios dejados por el Real, mientras los visitantes intentan imponer su juego de posesión y velocidad.

Con el global empatado y el segundo tiempo en curso, el duelo sigue abierto. El Metropolitano continúa siendo el escenario de una guerra deportiva que podría quedar grabada como otro hito en la rivalidad entre Atlético de Madrid y Real Madrid.